El currículum es un resumen de nuestra formación y experiencia, pero también es la carta de presentación de cómo somos y qué podemos aportar a la empresa. Por eso, es importante hacerlo atractivo para destacar por encima del resto de candidaturas, ya que hoy en día se reciben multitud de demandas de trabajo. Para evitar que nuestra propuesta acabe en la papelera, os dejamos unos consejos:
Sin faltas de ortografía ni mentiras. Revisa bien los textos escritos o incluso deja que otra persona lo lea. Las faltas de ortografía dan una mala imagen, independientemente del puesto al que se opte. Las invenciones tampoco tienen cabida si no quieres arriesgarte a que te pillen y las consecuencias sean peores que si dices la verdad desde el principio.
Diseño claro, sencillo y original. Ordena la información usando una cronología que vaya de lo más reciente a lo más antiguo. Diferencia bien los lugares donde has estudiado o trabajado y en qué períodos de tiempo. Es importante revisar las fechas para que todo esté bien. Incluye algún elemento que te identifique con respecto a otros currículum y no olvides enviarlo en formato PDF para evitar que el diseño elegido sufra modificaciones al abrirse en otro ordenador.
Personalización en función del puesto. No vale hacer un solo currículum y enviarlo a todas las compañías, hay que adaptarlo en función del puesto para el que se opta, teniendo claro si se pide una persona para panadería o para un despacho administrativo. Hay que tener claro de qué se quiere trabajar y cuál es la oferta de trabajo que hemos visto publicada.
Funciones específicas. Sé claro en las responsabilidades que eres capaz de asumir y detalla aquellos que hayas aportado en otras empresas. Poner el nombre de otra compañía y el período en el que estuviste no dice nada. Haz saber tu valía en función de tu experiencia.
Especifica tu disponibilidad. Para viajar, para cambiar de ciudad, para trabajar en diferentes turnos, etcétera. Que vean que eres una persona flexible que puede adaptarse a las diversas circunstancias.
No solo en papel. Envía el currículum vitae (CV) por correo electrónico, pero intenta que no sean las generales que aparecen en la página web. Busca o pregunta por direcciones de personas específicas como el director o el departamento de recursos humanos. Entrega el currículum a tus contactos (familiares, amigos, etcétera), pues ellos son tu mejor aval. Y, por supuesto aprovecha las plataformas web especializadas en la búsqueda de trabajo como es Servicioempleo, donde verás aumentadas tus posibilidades para encontrar en qué ciudades y empresas hay puestos disponibles.