Un despido laboral suele traer consigo una serie de consecuencias negativas, especialmente cuando es inesperado. Es una dura realidad para superar, sea a nivel económico que psicológico, especialmente porque en nuestra sociedad el empleo representa una fuente de reconocimiento y estatus social.
Por ello, quien sufre un despido se ve de repente incapaz de valerse por sí mismo, y se siente inútil y apático. Los efectos psicológicos de la pérdida del trabajo pueden representar una de las experiencias más desgastantes de la vida de una persona.
Se pasa por distintas etapas y estado de ánimo: angustia, búsqueda compulsiva, enfado y culpabilidad, para en fin llegar a una sensación de desánimo ante el fracaso. A partir de ese punto la situación va empeorando y puede llegar a deteriorar seriamente la propia autoestima y las relaciones interpersonales.
Para no llegar a este punto hay que pensar de manera positiva, tener una actitud abierta a reconocer las oportunidades que trae todo proceso de cambio.
Para ser capaces de superar este difícil momento se aconseja:
- Creer en sí mismo: analiza tus competencias actuales sin perder de vista tus objetivos y intereses. Debes elaborar un análisis racional de tus propias fortalezas y debilidades con el fin de corregir aquellos aspectos más deficitarios y destacar aquellos más desarrollados.
- No rendirse nunca: piensa de ser capaz de cualquier cosa, invierte el tiempo en la formación y en actividades creativas.
- No tener ansiedad: aprovecha de la una pausa del trabajo para reflexionar sobre tu vida y tus expectativas, puede que de tal manera aparezcan nuevas ideas y nuevas oportunidades de empleo.
- No perder las costumbres rutinarias: es importante seguir levantándose temprano por la mañana para mantenerte activo el metabolismo, haz deporte y mantente siempre informado.
- Hablar con la gente: habla abiertamente y hazte ayudar por tus familiares, amigos o profesionales.
- Dedicar tiempo a ti mismo/a y a tus hobbies: piensa a tu bien estar psicofísico y emplea el tiempo en cosas que te hacen feliz, retoma tus hobbies y desarrolla la creatividad.
Seguir siempre buscando: ocúpate en la tarea de encontrar trabajo. Elabora listas de tareas, procura mejorar siempre tu CV, y rastrea los anuncios a diario porque entre ellos podrías encontrar tu nuevo empleo.