Todos hemos soñado con tener un trabajo en el cual poder estar tranquilos y no hacer nada la mayoría del tiempo. Pero la realidad es muy distinta y a veces, el deber de estar sentado durante horas en tu puesto de trabajo sin saber qué hacer, es una situación desesperante que puede convertirse en una patología, el “Bored out”.
Es el nuevo síndrome laboral y básicamente es el exacto opuesto del “Burned out”, el mal estar provocado por el estrés prolongado en el trabajo. El bored-out, ósea el estar constantemente aburridos por no tener cosas que hacer o tareas interesantes a desempeñar, tiene consecuencias muy negativas, que van desde la falta total de motivación a el total desinterés hacia el propio trabajo.
Es interesante notar que si bien las consecuencias del bore-out son similares a las del estrés (depresión y descenso de la autoestima), a diferencia de éste, la persona que lo sufre no se encuentra exigida por demás sino que, por el contrario, su empleo suele ser monótono y rutinario.
También las distracciones y la falta de concentración son cómplices y alimentan el fenómeno del bored-out porque son causas y al mismo tiempo consecuencias de la perdida de interés en el trabajo.
Vamos a ver cómo poder evitar las distracciones y combatir el bored-out para seguir siendo productivos y motivados.
- Detecta qué te distrae
Cada persona es distinta así que tú mismo debes identificar qué cosa te distrae. Ahí van algunos sospechosos habituales: el email, las redes sociales y sus aplicaciones, blogs, los compañeros o tus propios pensamientos y preocupaciones.
- Distribuye bien el tiempo
No todos los temas requieren el mismo tiempo de esfuerzo y dedicación. Hay que intentar planificar de forma óptima el tiempo y sobre todo aprender a no postergar las tareas. Si no lo hacemos, provocaremos de forma directa o indirecta perdida de atención.
- Frena las distracciones
La clave es encontrar la manera para trabajar de forma ininterrumpida en una tarea. Por ello aconsejamos tres sencillas operaciones:
- Haz sólo una tarea a la vez.
- Cierra todas las aplicaciones, notificadores y cualquier cosa que no necesites para trabajar en esa tarea (Email, Twitter, Messenger, etc).
- Apaga el móvil y descuelga el fijo.
- Hable con los demás del problema
Cuenta a los otros tu problema y pídeles que no te distraigan. Te sorprenderá ver que la mayoría te respetarás y conseguirás hacer tu trabajo sin distracciones. También puedes hablarlo con tu jefe y pedir tareas más estimulantes.
Recuerda que lo peor que puedes hacer con una distracción no es caer en ella, sino caer una y otra vez y no hacer absolutamente nada. Así anímate, busca algo que te motiva y sigue los consejos, verás que volverás a ganar atención y capacidad en el trabajo.