El lenguaje y la forma que se elijen para redactar un anuncio de trabajo son elementos muy importantes y que tiene sus directas consecuencias sobre quién se va a inscribir a la oferta. Si el objetivo del anuncio es lo de encontrar al candidato ideal y más calificado para el puesto es imprescindible saber cuáles son las palabras adecuadas para anunciar un empleo.

Un reciente estudio realizado por una Universidad de Canadá y publicado en la Association for Psychological Science, revela la relación entre el lenguaje de la oferta de trabajo y la posibilidad de encontrar al candidato ideal para el puesto en cuestión.

La investigación constató que los anuncios de trabajo que hacen más hincapié en las oportunidades para el candidato que los requisitos exigidos, son los que reciben más currículos de candidatos excelentes.
El estudio creó diferentes anuncios y comprobó que los que mencionaban las aspiraciones y deseos de los candidatos, fueron más vistos y recibieron la respuesta de personas más cualificadas que los que enfatizaban solamente los requisitos necesarios para el puesto.

En conclusión, los solicitantes de empleo se sienten más atraídos por los puestos que se adaptan no sólo a sus necesidades salariales sino también a las psicológicas, es decir las posibilidades profesionales que ofrece el puesto y la satisfacción que les puede aportar.
Por ello, al redactar el anuncio es importante hacer la oferta atractiva, mostrar cómo el trabajo podría proporcionar posibilidades para avanzar profesionalmente, y destacar características como la autonomía y la flexibilidad.

Por ejemplo se pueden incluir unas frases como “buscamos proporcionar a los empleados una experiencia de trabajo que fomente su crecimiento profesional” o “usted tendrá la oportunidad… para desarrollar sus habilidades en muchas áreas”.

A lo mismo hay que prestar una cierta atención a no sobredimensionar el puesto de trabajo. Frases como: “el candidato seleccionado deberá tener excelentes habilidades escritas y verbales”, desaniman desde inmediato a los candidatos. Exigir a los candidatos conocimientos que no son necesarios es además un riesgo porque un trabajador sobrecualificado abandonará la empresa en cuanto encuentre un puesto más acorde con su perfil.

Por último hay que recordar que los anuncios que usan un lenguaje demasiado complicado sugieren un ambiente de trabajo agobiante y que un anuncio chistoso dará impresión de falta de profesionalidad. La oferta de empleo tiene que hablar a la gente de una manera simple y clara utilizando la segunda persona (usando ‘tú’ o ‘usted’ en vez de nosotros”) y sobretodo explicando con sinceridad las características y mansiones del puesto y el perfil de la empresa que ofrece el empleo.