La tasa de paro general en el conjunto de la Unión Europea (UE) se mantuvo estable desde agosto 2013 en el 12,2 % de la población activa en la eurozona, según los datos publicados este martes por Eurostat, la oficina comunitaria de estadística.
En agosto pasado había en la UE 26,6 millones de parados de los cuales 19,2 millones pertenecían a la zona euro, según las estimaciones de la oficina comunitaria de estadística. Con respecto a agosto de 2012, el número de desempleados aumentó en 882.000 personas en los Veintiocho y en 895.000 en la zona del euro.
Más exactamente, durante los últimos doce meses el paro aumentó en dieciséis Estados miembros, disminuyó en once y se mantuvo estable solo en uno, Polonia.
Los mayores aumentos se observaron en Chipre (del 12,3% al 16,9%) y Grecia (del 24,6% al 27,9% entre junio de 2012 y de 2013), mientras que los descensos más significativos fueron los de Letonia (del 15,6% al 11,4% entre los segundos trimestres de 2012 y de 2013) y Estonia (del 10,1% al 7,9% entre julio de 2012 y de 2013).
Mientra que los Estados miembros que se quedan con las menores tasas de desempleo son Austria (4,9%), Alemania (5,2%) y Luxemburgo (5,8%).
La crisis financiera que azota a la zona euro desde hace unos cinco años, afecta en su mayor parte a la población joven, sobre todo en Grecia y España. Sin embargo el desempleo juvenil disminuyó una décima en agosto tanto en los Veintiocho como en la zona del euro, y se situó, respectivamente, en el 23,3% y el 23,7%.
Estas cifras suponen que en agosto había unos 5,5 millones de desempleados menores de 25 años en la UE, de ellos 3,4 millones en los países de la moneda única. Los datos revelan que en Grecia se registró una tasa del 57,3 %, mientras que en el caso de España, en septiembre, esta tasa fue del 56,5 %, lo que implica unos 947 000 jóvenes sin empleo. Por otro lado las tasas más bajas de paro juvenil se registraron en Alemania (7,7 %) y en Austria (8,7 %).
Se nota que, si bien en medidas distintas, la gran parte de los 28 países de Europa está afectada por la destrucción de empleo. La crisis económica y la austeridad, está claramente llevando a situaciones de desempleo, desigualdad, desalojos forzados y, por ende, la indignación de la población crece.