Hoy en día, la prevención de riesgos laborales en el entorno laboral está regulado por ley con el fin de proteger a los trabajadores. Así, se denomina prevención de riesgos laborales al conjunto de actividades o medidas adoptadas o previstas en todas las fases de actividad de la empresa con el fin de evitar o disminuir los riesgos derivados del trabajo. Estas acciones quedan definidas y reguladas en la Ley 31/95, de 8 de noviembre y en la posterior Ley 54/2003, de 8 de noviembre, de reforma del marco normativo.

La salud laboral es básica al desarrollar una profesión. Ésta se construye en un medio ambiente de trabajo adecuado, con condiciones de trabajo justas, donde los trabajadores puedan desarrollar una actividad con dignidad y donde sea posible su participación para la mejora de las condiciones de salud y seguridad.

Los trabajadores, por tanto, tienen derecho a participar en la empresa en las cuestiones relacionadas con la prevención de riesgos laborales. Además, varias figuras velan por el buen funcionamiento de la normativa; en las empresas o centros de trabajo que cuenten con seis o más trabajadores, la participación de éstos se canalizará a través de sus representantes y de la representación especializada como son los delegados de prevención que constituyen la representación de los empleados en la empresa con funciones específicas en materia de prevención de riesgos en el trabajo.

Asimismo, en España, se ha instaurado el Comité de Seguridad y Salud que es el órgano paritario y colegiado de participación destinado a la consulta regular y periódica de las actuaciones de la empresa en materia de prevención de riesgos.

Pero, ¿por qué es importante esta normativa? Las características de los puestos de trabajo, de las actividades realizadas en los mismos y de las sustancias utilizadas, pueden tener una influencia significativa en la generación de riesgos para la seguridad y salud de los trabajadores. Cada trabajo lleva consigo unos riesgos específicos. Conocer y prevenir estos riesgos es imprescindible para evitar los posibles efectos de los mismos sobre la salud. Por ello, la prevención de riesgos laborales, para ser realmente eficaz, debe estar integrada en el conjunto de actuaciones de la empresa y en todos los niveles jerárquicos de la misma desde el inicio de su actividad.